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Anabel Angus: ‘Siempre he sido responsable con mi imagen pública’



— ¿En qué está trabajando durante los primeros meses del año?

— Me estoy preparando para el casting de la tercera temporada del programa Yo me llamo. Será algo bastante intenso, ya que haremos casting en la mayoría de ciudades del país. Existe mucha expectativa.

— ¿Cómo van los planes para cubrir el Carnaval con Unitel?

— Vamos a estar haciendo todas las transmisiones con Unitel. También estoy cubriendo las precarnavaleras en vivo, la coronación de la reina y el corso. Todas las actividades previas.

— ¿Ve otros programas nacionales?

— Cuando tengo tiempo veo el noticiero para estar informada de lo que sucede en el país. También me gustan mucho los deportivos y ahora más con el Dakar y la antesala al Mundial.

— ¿Qué es lo positivo y lo negativo de la televisión nacional?

— Considero que hay mucho talento joven. Me gusta cómo está creciendo la TV, veo que los canales se animan a invertir más en escenografía y a hacer contenidos nacionales, eso es importante. Hay más inversión. Si tendría que mencionar algo negativo, es que me gustaría que estemos más unidos en los canales. En Argentina, por ejemplo, se comparten los conductores para programas especiales o realitys, mientras que aquí nos autocensuramos en ese aspecto.

— Es la tercera temporada de Yo me llamo ¿Cómo ve la evolución del programa y qué aporta a la TV?

— Principalmente le abre las puertas al talento. Aquí existe el mito de que los músicos no pueden ganar dinero y vivir de su talento; entonces, para aquel músico que pensaba que nadie le iba a dar una oportunidad ahora ve que hay un programa que le dice: “Vení, mostrá que vos podés hacerlo y te harás conocido, tendrás giras nacionales y, además, si sos el mejor vas a ganarte 10.000 dólares”.

— ¿Cuáles han sido los momentos más difíciles de su carrera?

— Cuando comencé de pequeña fue por amor al arte. No tenía muchos recursos para vestirme, no tenía ropa, no tenía zapatos, tenía pocas cosas —como cualquier niña— y, para la televisión, necesitas variar todos los días. Era un poco difícil pero siempre conté con mucho apoyo de mis tías, mi familia y mis amigas, que me prestaban o regalaban cosas.

Cuando estaba en Unitoons me sentía muy grande, no me sentía conforme físicamente. Tuve que superar el tema de lo físico, aprender a vestirme, olvidar esa rebeldía adolescente que uno tiene y adecuarme a que yo tenía un trabajo y no podía exponerme como cualquier chica de mi edad en la calle. Tenía que ser un ejemplo para los niños y era una responsabilidad muy grande.

— ¿Cuáles son sus otras pasiones?

— Yo he hecho teatro y me ayudó muchísimo porque después mi vida la dediqué a la televisión. Lo que sí he hecho fuera del aire y que me gusta mucho es el tema de trabajo social. He trabajado con los niños con cáncer y siempre sentí que tenía un apego muy grande a los niños. Me gusta pasar el tiempo con ellos para que se olviden de la enfermedad que tienen y que disfruten su vida.

— ¿Cómo maneja la fama?

— Yo siempre he sido transparente, nunca he ocultado lo que soy ni de dónde vengo. Nunca me dio vergüenza decir si tengo o no tengo dinero. Yo tengo una familia conservadora, yo no salgo a discotecas, y generalmente hago reuniones con mi entorno más cercano y de confianza. Siempre he sido muy responsable con mi imagen, ya que es pública. Lo difícil era ver en los programas de chismes diciendo cosas que no eran correctas. Detrás de cada persona hay una familia y me molestaba ver cómo se inventaban cosas, hacían montajes con mis fotos y demás especulaciones.


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