— ¿Desde cuándo es reportera?
— Van a ser tres años que estoy en red Uno, comencé en PAT también realizando unidades móviles para la revista Hola país. Cumpliré seis años de carrera periodística.
— ¿Cómo es cubrir noticias como las que ocurren estos días, con dinamitazos, gasificaciones y transmitir en vivo sin entrar en pánico?
— Es complicado estar presentable para hacer reportes en vivo en este tipo de noticias, además, a veces, las condiciones nos obligan a caminar de un extremo a otro. Para no-sotros, el centro de la ciudad es como el patio de nuestra casa, lo conocemos a fondo y vamos de aquí para allá por ello siempre utilizo zapatos planos y ropa cómoda, pero siempre un saco elegante o un blazer para salir bien en la Tv.
— Cuéntenos, ¿cómo es un día laboral en su vida?
— Me levanto, leo periódicos, redes sociales y tomo un buen desayuno. Me voy al canal a reunirme con el equipo y el jefe de prensa —Yery Guiteras— y luego cada uno se va a su fuente. Actualmente me toca el área política, por eso estoy en la plaza Murillo a la espera de lo que ocurra. Aproximadamente ,a las 11.30 voy al canal para editar mis notas y dejarlas listas para que salgan en el informativo del mediodía. Volvemos al trabajo a las 15.30 y hago la misma rutina para llegar al noticiero nocturno.
—¿Qué hace en su tiempo libre?
— Bailo flamenco en la escuela Á Compás con el maestro Yadir Vázquez. Estoy allá desde hace cuatro años, pero bailo desde mis cinco; es mi pasión y mi distracción. El tiempo que queda lo dedico a mi familia y a mi novio, Álvaro Arias, que es periodista de Unitel, quien siempre me apoya en todo lo que hago.
— ¿No siente temor cuando la coyuntura es complicada, utiliza algún elemento de seguridad?
— Claro que me da un miedo fatal, pero siempre hay que tener mucho cuidado y ayudarse con los compañeros. Respecto a la seguridad, en el canal nos facilitan cascos y máscaras, pero muchas veces es más práctico utilizar un kleenex o fumar un cigarrillo (ríe).
— ¿Cuál fue la noticia más difícil que le tocó cubrir?
— El tener que viajar a hacer la cobertura de un accidente de tránsito en el que habían varios muertos; también las noticias en la que la gente de escasos recursos necesita mucha colaboración. Vemos que esas personas están más expuestas a las enfermedades y tienen diferentes problemas de toda índole. Todo eso me hace pensar que la vida no es justa y pregunto al cielo, ¿qué pasa? Pues, las personas que menos tienen son las que más problemas sufren.
— ¿Si pudiera ir atrás en el tiempo, elegiría nuevamente el periodismo?
— Por supuesto que sí. Me encanta el periodismo o tal vez me gustaría ser maestra. Mi mamá es profesora de kínder, tiene mucha paciencia y a mí me gusta mucho enseñar, tal vez algún día me dedique a ello también.
— ¿Tiene el deseo de entrevistar a alguien en particular?
— Sí, me hubiera gustado entrevistar al papa Francisco, verlo, poder compartir algún momento con él. También me encantaría entrevistar al presidente estadounidense, Barack Obama, porque ha marcado una diferencia en lo que es la historia de Estados Unidos, está ayudando mucho a los migrantes latinos y gracias a él se están restableciendo las relaciones de su país con Cuba, luego de muchos años.
— ¿Le gustaría tal vez conducir un programa que no sea noticioso en un futuro?
— Me gusta mucho el tema cultural y eso es algo que en nuestro país aún no se da mucho a conocer.
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