No fue fácil ubicar a la diva de la televisión, María Celeste Arrarás, pero tampoco imposible. Ajetreada por su día a día y por las actividades que su trabajo requiere, la pelirroja de Telemundo accedió hablar con El Día en una entrevista exclusiva.
Con agrado dijo "Te respondo las preguntas con mucho gusto esta semana porque la otra estoy viajando". Tal cual ella lo hizo, respondió a todo lo que se le cuestionó y mucho más. La ganadora de un Emy habla de sus hijos, su trabajo y cómo ha superado los dos divorcios por los que ha pasado.
P. ¿Cuál ha sido la nota más dura que le ha tocado dar?
¡Ha habido tantas!. A mí las noticias fuertes me afectan como a todo el mundo, pero después del programa. Durante la selección de noticias y durante el show me toca ser como el cirujano que está en una sala de emergencias. No puedes detenerte a lamentarte porque se te muere el paciente.
Pero hay excepciones. Se me hizo un nudo en la garganta y se me aguaron los ojos fortísimo cuando me tocó anunciar en vivo la muerte de Celia Cruz. La conocía personalmente y le tenía un gran cariño. Ella siempre veía mi show y me llamaba con frecuencia para comentar sobre los reportajes que sacábamos al aire, sobre mi ropa y mi peinado.
¡Tenía una opinión para todo! por eso me afectó. Yo estaba en vivo en el show cuando ella falleció, así que no tuve tiempo de asimilar lo sucedido antes de dar la noticia.
P. ¿Cuál ha sido el momento más duro que ha pasado por su trabajo?
He trabajado como periodista en situaciones duras. Una vez estuve en México "retenida en contra de mi voluntad" por un grupo de policías corruptos en la frontera. También he tenido metralletas en la cabeza durante un golpe de Estado en Haití y situaciones por el estilo.
P. ¿Qué consejos daría para estar años en la televisión y seguir vigente como usted lo ha hecho?
Hay que tener enfoque y disciplina. Y creo que es importante no perder la integridad. Si uno actúa según sus principios en todos los aspectos de la vida, las posibilidades de que te vaya bien en el trabajo se multiplican y lo mejor de todo es que eso garantiza el éxito como ser humano.
P. Aparte de la televisión ¿a qué se dedica?
Si hago otras cosas es porque me gusta la diversidad y los retos. El dinero se gana con mucho esfuerzo y hay que hacerlo crecer, no malgastarlo. Vivo muy bien, pero podría vivir mejor, pero no lo hago porque procuro guardar para el futuro.
P. ¿Qué le dice a otras mujeres que como usted han tenido que separarse con hijos?
Les diría que como todo en la vida, para salir exitosamente de situaciones difíciles y dolorosas, hay que buscar el lado positivo de las cosas. Yo descubrí dos cosas positivas de mi divorcio. Primero, que cuando una se separa durante el tiempo que tenemos a los niños, ellos son solo para nosotras y eso lleva a una mayor compenetración con nuestros hijos. Mi relación con ellos se afianzó porque dejé de tener con quién dividir la responsabilidad del día a día. Creo que lo mismo le pasó a mi ex, pues ahora, cuando le toca pasar tiempo con los niños él los aprovecha más porque le toca solo con ellos.
La segunda ventaja es que cuando uno está casado con hijos nunca tiene tiempo para sí mismo. Ahora los fines de semana en que mis niños están con el papá, yo los aprovecho para hacer mis cosas, salir con amistades, viajar o simplemente no hacer nada. Así que dentro de lo dramático de un divorcio hay cosas positivas y en eso es que uno se tiene que enfocar.
P. ¿Un hijo adoptivo presenta retos distintos de los biológicos? Si es así, ¿cómo se superan?
Tras la adopción de mi hijo Adrián yo descubrí que los hijos adoptivos y biológicos se quieren igual. Es más, cuando Adrián vino a vivir con nosotros yo estaba embarazada de Lara, que nació tres meses después. Y si estando en el hospital tras dar a luz me hubiesen preguntado a cuál de los dos quería más, yo hubiese dicho en aquel momento que quería más a Adrián. Uno aprende a querer a los hijos con el tiempo y las experiencias vividas. A Adrián ya le había cuidado cuando tuvo fiebre, ya me había dicho "mamá", ya lo había consolado en medio de la noche cuando tuvo pesadillas. Todas esas cosas te unen a tus hijos, independiente de si son biológicos o adoptados.
Hoy en día los quiero a los tres con la misma intensidad, pero a cada uno diferente, porque tienen personalidades distintas.
P. ¿Cómo hace para lidiar con sus hijos?
Hablo con ellos de todo pero siempre voy a ser la mamá, no la mejor amiga, la que les va a decir las verdades y decirles lo que sea bueno para ellos-les guste o no. No soy ultra estricta ni conservadora, les doy libertad y me gusta que sean independientes pero cuando tengo que trazar la raya lo hago porque soy la mamá, no la amiguita.
P. ¿Cuál fue el motivo de sus dos divorcios?
Mi primer esposo es al día de hoy uno de mis mejores amigos porque me quiso sin egoísmo y me ayudó a crecer como persona y como profesional. Me dio alas para encontrarme .Yo tenía 24, pero 24 muy inocentes y él tenía 40 bien vividos, entonces me apoyó en todo. Me ayudó a establecer mi crédito financiero para que el día que él faltara no tuviese problemas. Me apoyó en mi carrera. Cuando se me presentó la oportunidad de crecer profesionalmente con una excelente oportunidad de trabajo en la televisión de EEUU, me dijo que la aceptara y que él viajaría de Puerto Rico a Nueva York todos los fines de semana y que si me iba bien, él eventualmente mudaría su negocio a EEUU. Pero entre una cosa y otra la distancia nos alejó. Aunque terminamos divorciándonos, cuando es incondicional contigo, como lo fue él conmigo, queda un sentimiento profundo, bonito para toda la vida.
Mi segundo matrimonio fracasó porque el padre de mis hijos me fue infiel y aunque intentamos darnos una oportunidad, el daño fue irreparable.
P. ¿Cuál es su elixir de belleza?
Yo no vivo pendiente de tratamientos de belleza ni soy esclava del espejo. Lo único que hago religiosamente cuando no estoy en televisión es mantener el cutis ultra limpio y usar bloqueador solar. Esa es la única fórmula que funciona.
Con agrado dijo "Te respondo las preguntas con mucho gusto esta semana porque la otra estoy viajando". Tal cual ella lo hizo, respondió a todo lo que se le cuestionó y mucho más. La ganadora de un Emy habla de sus hijos, su trabajo y cómo ha superado los dos divorcios por los que ha pasado.
P. ¿Cuál ha sido la nota más dura que le ha tocado dar?
¡Ha habido tantas!. A mí las noticias fuertes me afectan como a todo el mundo, pero después del programa. Durante la selección de noticias y durante el show me toca ser como el cirujano que está en una sala de emergencias. No puedes detenerte a lamentarte porque se te muere el paciente.
Pero hay excepciones. Se me hizo un nudo en la garganta y se me aguaron los ojos fortísimo cuando me tocó anunciar en vivo la muerte de Celia Cruz. La conocía personalmente y le tenía un gran cariño. Ella siempre veía mi show y me llamaba con frecuencia para comentar sobre los reportajes que sacábamos al aire, sobre mi ropa y mi peinado.
¡Tenía una opinión para todo! por eso me afectó. Yo estaba en vivo en el show cuando ella falleció, así que no tuve tiempo de asimilar lo sucedido antes de dar la noticia.
P. ¿Cuál ha sido el momento más duro que ha pasado por su trabajo?
He trabajado como periodista en situaciones duras. Una vez estuve en México "retenida en contra de mi voluntad" por un grupo de policías corruptos en la frontera. También he tenido metralletas en la cabeza durante un golpe de Estado en Haití y situaciones por el estilo.
P. ¿Qué consejos daría para estar años en la televisión y seguir vigente como usted lo ha hecho?
Hay que tener enfoque y disciplina. Y creo que es importante no perder la integridad. Si uno actúa según sus principios en todos los aspectos de la vida, las posibilidades de que te vaya bien en el trabajo se multiplican y lo mejor de todo es que eso garantiza el éxito como ser humano.
P. Aparte de la televisión ¿a qué se dedica?
Si hago otras cosas es porque me gusta la diversidad y los retos. El dinero se gana con mucho esfuerzo y hay que hacerlo crecer, no malgastarlo. Vivo muy bien, pero podría vivir mejor, pero no lo hago porque procuro guardar para el futuro.
P. ¿Qué le dice a otras mujeres que como usted han tenido que separarse con hijos?
Les diría que como todo en la vida, para salir exitosamente de situaciones difíciles y dolorosas, hay que buscar el lado positivo de las cosas. Yo descubrí dos cosas positivas de mi divorcio. Primero, que cuando una se separa durante el tiempo que tenemos a los niños, ellos son solo para nosotras y eso lleva a una mayor compenetración con nuestros hijos. Mi relación con ellos se afianzó porque dejé de tener con quién dividir la responsabilidad del día a día. Creo que lo mismo le pasó a mi ex, pues ahora, cuando le toca pasar tiempo con los niños él los aprovecha más porque le toca solo con ellos.
La segunda ventaja es que cuando uno está casado con hijos nunca tiene tiempo para sí mismo. Ahora los fines de semana en que mis niños están con el papá, yo los aprovecho para hacer mis cosas, salir con amistades, viajar o simplemente no hacer nada. Así que dentro de lo dramático de un divorcio hay cosas positivas y en eso es que uno se tiene que enfocar.
P. ¿Un hijo adoptivo presenta retos distintos de los biológicos? Si es así, ¿cómo se superan?
Tras la adopción de mi hijo Adrián yo descubrí que los hijos adoptivos y biológicos se quieren igual. Es más, cuando Adrián vino a vivir con nosotros yo estaba embarazada de Lara, que nació tres meses después. Y si estando en el hospital tras dar a luz me hubiesen preguntado a cuál de los dos quería más, yo hubiese dicho en aquel momento que quería más a Adrián. Uno aprende a querer a los hijos con el tiempo y las experiencias vividas. A Adrián ya le había cuidado cuando tuvo fiebre, ya me había dicho "mamá", ya lo había consolado en medio de la noche cuando tuvo pesadillas. Todas esas cosas te unen a tus hijos, independiente de si son biológicos o adoptados.
Hoy en día los quiero a los tres con la misma intensidad, pero a cada uno diferente, porque tienen personalidades distintas.
P. ¿Cómo hace para lidiar con sus hijos?
Hablo con ellos de todo pero siempre voy a ser la mamá, no la mejor amiga, la que les va a decir las verdades y decirles lo que sea bueno para ellos-les guste o no. No soy ultra estricta ni conservadora, les doy libertad y me gusta que sean independientes pero cuando tengo que trazar la raya lo hago porque soy la mamá, no la amiguita.
P. ¿Cuál fue el motivo de sus dos divorcios?
Mi primer esposo es al día de hoy uno de mis mejores amigos porque me quiso sin egoísmo y me ayudó a crecer como persona y como profesional. Me dio alas para encontrarme .Yo tenía 24, pero 24 muy inocentes y él tenía 40 bien vividos, entonces me apoyó en todo. Me ayudó a establecer mi crédito financiero para que el día que él faltara no tuviese problemas. Me apoyó en mi carrera. Cuando se me presentó la oportunidad de crecer profesionalmente con una excelente oportunidad de trabajo en la televisión de EEUU, me dijo que la aceptara y que él viajaría de Puerto Rico a Nueva York todos los fines de semana y que si me iba bien, él eventualmente mudaría su negocio a EEUU. Pero entre una cosa y otra la distancia nos alejó. Aunque terminamos divorciándonos, cuando es incondicional contigo, como lo fue él conmigo, queda un sentimiento profundo, bonito para toda la vida.
Mi segundo matrimonio fracasó porque el padre de mis hijos me fue infiel y aunque intentamos darnos una oportunidad, el daño fue irreparable.
P. ¿Cuál es su elixir de belleza?
Yo no vivo pendiente de tratamientos de belleza ni soy esclava del espejo. Lo único que hago religiosamente cuando no estoy en televisión es mantener el cutis ultra limpio y usar bloqueador solar. Esa es la única fórmula que funciona.
Comentarios
Publicar un comentario