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La conductora de Brujerías se llama Valeria. Dice que nació en Nueva Zelanda, en una comunidad muy mística que aún mantiene a las hechiceras celtas

La conductora de Brujerías se llama Valeria. Dice que nació en Nueva Zelanda, en una comunidad muy mística que aún mantiene a las hechiceras celtas. “Tengo 168 años, pero aún me mantengo joven y bella”, afirma.

Estudió en la academia de magia y hechicería ElfridaClagg, resaltando que fue la primera mujer en ser ministra de magia.

La Guía platicó con ella y esto fue lo que nos dijo.

LG: Resúmenos tu trayectoria en los medios

V: Mi trayectoria en los medios de comunicación no es nueva, pues escribí varios artículos sobre relatos y leyendas verdaderas sobre cosas que pasaron en mi pueblo y en el mundo entero. Tengo una columna en el periódico de circulación mágica Ocus, donde escribí sobre Bolivia y los niños de este país. La televisión es algo nuevo, pues este tipo de tecnología no existe en el mundo de la magia. Algo parecido a la televisión en mi mundo es mi fiel y adorado espejo mágico, que me hace renegar pero tiene muy buen corazón a pesar de ser solamente una cabeza... (sonríe).

LG: ¿Cómo te unes a Brujerías?

V: Me uno para enseñar tanto a niños como adultos que la magia también puede ser divertida. La producción de ATB se contactó conmigo al leer mis columnas y lo que escribí sobre Bolivia y los niños.

LG: ¿Qué es lo que más te atrajo del proyecto?

V: Lo que más me atrajo fue el misterio que posee Bolivia y sus niños. Los niños bolivianos no son como los demás, ellos tienen la capacidad de convertirse en aprendices míos tan rápido como un hechizo bien realizado, son místicos e inteligentes a la vez.

De ahí nace la idea de mezclar la tecnología de los humanos mortales con mis conocimientos de magia y hechicería, y así crear un programa didáctico, lleno de misterio, conocimiento y diversión.

LG: ¿Qué características debe tener una conductora para trabajar con niños?

V: Creo fielmente en que todos tenemos un niño interior, hasta mi serpiente Sasha es una juguetona y niña. Creo que para trabajar bien con niños hay que ponernos a su altura, comprenderlos, no hablarles como si fueran seres indefensos y simplemente jugar con ellos.

LG: ¿Cómo definirías al programa?

V: Es diferente, místico, entretenido... mis aprendices se irán fascinados con las cosas que traje desde mi castillo para ellos para divertirnos. Les enseñaré muchas cosas en el programa y también espero que ellos me enseñen más sobre el mundo de los mortales.

LG: ¿Qué esperas lograr con Brujerías?

V: Mi objetivo siempre fue tener a los aprendices más sabios y más inteligentes de todo el mundo, por eso espero que con el programa pueda llevarme a muchos magos y brujas. Necesito tenerlos en mi castillo porque a pesar de tener a mis fieles compañeros búho Sasha y espejo, estaré aún más completa si me llevo a los mejores y más sabios aprendices.

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